viernes, 9 de diciembre de 2011

Periodismo vs fútbol

              Un pito se escucha en la lejanía de millones de países a través de la dura pantalla de un televisor; colores varios adornan la imagen del momento en la resequedad de un papel o muestran lo actual mediante la rapidez del internet. Una jugada, varios pies, la redonda disfruta el presente, y llora el futuro, a sabiendas de miles de notas, millones de síntesis, conferencias de prensa, más de 1.156.887.203 palabras alusivas al tema, solo un 25% sobre fútbol.
           Un clásico, es sinónimo de dos equipos dominadores de marketing, marcas bien formadas y vendidas, quizás también por ahí va el tema de los famosos “favoritos” y es bien sabido, que cuando se acerca alguno de estos eventos, los editores se frotan las manos augurando miles de lectores amantes de lo frívolo.

A veces poco importa la calidad del partido, solo se vende su magnitud, y en eso ayudan actores como Mou o Cr7, siluetas de calidad en sus roles, pero también, expertos en dinámicas para dominar este deporte desde fuera de la cancha.
La historia es invitada de primera fila en la mística del Santiago Bernabéu, este sábado, choque de lo mejor que puede ofrecer hoy por hoy el balompié mundial, al igual que el año pasado, gran número de las individualidades más destacadas de este deporte, otro espectáculo para nuestra razón, que canalizaremos a través de ojos y oídos, un juego de ajedrez sublime y el deporte en su más alto nivel: Madrid-Barcelona.
El malestar ahonda el cuerpo de los que amamos este juego, o quizás ese calor que se trasforma en veloces latidos del corazón, cada vez que sentimos distar el tema de lo deportivo, y llenarnos de árbitros, duelos dialecticos, quien rega la grama, o la mirada que esté lanzó a aquel, mientras la novia de fulano abrazaba a mengano.
Quizás por esa ignorancia popular para con el juego, se decide concentrar tan poca información en las acciones dentro de los roles que realmente hacen famosos a estos personajes. Saber quién llega mejor al clásico es un dificultad, aún compleja de explicar si se está muy adentro de ambos vestuarios, así es el fútbol, difícil de predecir y más en estos partidos en los que la gama de probabilidades rozan la paridad por estadísticas y méritos que los elevan a ser dos de los mejores equipos del mundo.
Santiago Solari, escribía en una de sus últimas notas para el País, sobre el antagonismo entre jugadores y periodistas; la verdad es que por muy bueno que sea Batman, sin el Guasón, no hay historia, o ¿Qué sería de la vida de Lex Luthor con la mera facilidad de poder dominar el mundo sin traba alguna?... Ambas labores se enriquecen mutuamente, cocinan mejores platillos para el consumismo general. De la misma forma que el periodista exitista y superficial del juego, daña el material, lo hace el jugador o técnico que dedica horas a alimentar al monstro de la banalidad.
Mañana sábado, el deporte volverá a vivir un choque de alto nivel, con jerarquía común solo para los gustos del fútbol y entretenimiento (Un Madrid-Barça es de amplia latitud), a sabiendas de que el partido dejará muchas cosas para el análisis y estudio del juego, solo espero, que la mayoría de las palabras se siembre, solo, en sana relación con la pelota. Para ver novelas hay canales especializados.
Lisbm. Lizadro Samuel.
Para  los gustosos de la literatura, los invito a pasar por aquí:  http://cuentosdelizandro.blogspot.com/2011/12/un-amor-tan-real-como-imposible-mas-que.html

3 comentarios:

  1. grande el analisis! saludos man! by: zarraga :D

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  2. Gracias por opinar Michan... Saludos.

    Gracias Zarraga ¡Abrazo hermano! Saludos...

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