lunes, 9 de enero de 2012

1… 2… y… Ya van tres


La figura fémina formaba la discordia en la oscuridad; nadie entendió el porqué de que su belleza se hiciera apreciar en aquel lugar. Era incongruencia en la gala, era, hasta quizás, falta de lealtad para con otras con mayor relación que la que ella podía dar.
                
Justo después de que se gambeteara la monotonía y quedara la duda sobre Shakira entregando el premio a la mejor jugadora del año; la voz Ronaldo escribía la hoja final en las “crónicas de un triunfo anunciado”, con sabor a grandeza, tanto por lo que figura ese enano de genética dudosa, como por sostener la espada, que al igual que la de su mentor Pep, ve de soslayo la garganta silenciada de su ego.                

La discordia sentada en primera fila, se ríe de todos los premios individuales, mientras saca el dedo medio para todos aquellos que discuten sobre la valides de algo tan subjetivo como irreal, en un deporte cuyas virtudes son grupales.
                
Con una mueca típica de él, el dueño del balón, tal como en el campo, recibía el abrazo en elogios que Messi le mandaba desde la palestra; y Cr7 resignaba su vanidad con la previa al partido en Málaga. Parece que en Madrid, ya habían leído la novela.
                
En palabras de Diego La Torre (@Dflatorre), Lio fue el mejor extremo del mundo y hoy, domina todo el campo. A mi edad, es lo mejor, junto a este Barcelona, que he podido ver.
                
Exponer las virtudes del argentino, sería redundar en analistas mundiales. Su humildad lo convierte en ejemplo de vida, y su hipotética ausencia, podaría un maratón igualado entre Iniesta, Xavi y compañía, para hacerse con las caricias del premio, que tal vez, poco hubiese resistido la seducción de las botas de cualquiera de estos dos.
                
Un jugador, desde el aspecto global del negocio, es un producto; y si son menos los que entienden el juego, en relación a los que lo disfrutan, el gol se exhibe como máximo estandarte de elogios. Injusticia en mediocridad subjetiva, para valorar quién aporta más al equipo: ¿Pique, Ramos, Xabi, Xavi, Iniesta, Cr7, Benzema, Rooney, Puyol, Casillas, Hart, Silva, Yaya, etc., etc., etc.? Incluso, los símiles de formas distantes resultan como preguntar que es mejor ¿Un tigre o una pantera?... ¿Mejor para qué? ¿Para quién? Y ¿En que momentos?...
                
Se trata de corregir premiando un 11 de gala, que jamás sabremos como jugaría. ¿Cuáles son los valores a premiar? Siendo más ambiguos los criterios para los D.t’s... Sin importar el caso, los premiados, cuelgan la medalla de mérito, mientras mi generación vive la “Era de Messi”, cuando se ansia y teme con su retirada… es que el proyecto de su carrera amenaza ver de reojo a las de Pele, Maradona y Di Stefano.

2 comentarios:

  1. Messi es lo más justo que hay en el fútbol, sino veamos el podio final. CR3 ha quedado en 2° lugar, algo que me temía, por la barbaridad de goles que mete a equipillos de segunda, creo que tiene una media de casi 1.3 goles por partido, pero contra el Barza tiene una media de menos de 0.2, mientras contra el RM Messi tiene una media de 0.9, y su media general también es por ahí. Hubiera merecido el premio el CR3?, según mi punto de vista, no, porque es el premio al mejor jugador, no al mejor supuesto goleador (digo supuesto porque en las grandes citas se borra).

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  2. Cuentas a parte, creo que Messi, hoy por hoy, esta un escalón por en sima de todos. Saludos y gracias por pasar por el blog.

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